Wilbur Ross, secretario de Comercio de Estados Unidos, indicó que se extenderá por otros 90 días una serie limitada de exenciones que habían protegido a las redes rurales y a otros clientes estadounidenses de la prohibición de hacer negocios con Huawei.
‘Algunas compañías de telecomunicaciones en Estados Unidos son dependientes de Huawei y, por lo tanto, se considera apropiado un aplazamiento de 90 días’, explicó Ross.
‘Les estamos dando un poco más de tiempo para que se vayan’, agregó. Ross dijo que la próxima fecha límite será alrededor del 19 de noviembre, y que la dependencia gubernamental decidió colocar 46 filiales más de Huawei en su lista de entidades.
El anuncio no aborda las preocupaciones más amplias de seguridad nacional sobre Huawei, ni responde a la gran pregunta de si las compañías de chips de Estados Unidos y otros proveedores importantes pondrán vender piezas a China.
El presidente Donald Trump, durante el fin de semana, indicó que Estados Unidos estaba ‘muy bien con China y hablando’, pero también sugirió que no estaba listo para firmar un acuerdo comercial.
Huawei, la compañía de tecnología más grande de China por ventas, ha estado en el centro del deterioro de las tensiones y ha sido llamada la ‘moneda de cambio’ en las negociaciones comerciales entre Washington y Beijing. Trump había dicho que anticipaba hablar con el presidente chino Xi Jinping.
A principios de este mes, la guerra comercial entre los dos países se intensificó cuando Estados Unidos anunció una próxima ronda de aranceles del 10% sobre las importaciones chinas entre el 1 de septiembre y el 15 de diciembre.
China respondió con un boicot a los productos agrícolas estadounidenses y permitió que su moneda se devaluara, lo que indica que esto puede ayudar a amortiguar el golpe arancelario.
