La agencia de calificación Standard & Poors (S&P) rebajó hoy la previsión para el fabricante sueco de equipos de telecomunicaciones Ericsson de negativa a estable debido al empeoramiento de las perspectivas de crecimiento de la empresa.
Ese cambio en la previsión sobre Ericsson obedece a «nuestra hipótesis revisada de que una mejora de la rentabilidad en 2013-2014 sería difícil de lograr» y a la «incertidumbre» sobre los activos de ST-Ericsson, la compañía de riesgos compartidos creada en 2008 por el fabricante sueco y el grupo franco-italiano STMicroelectronics.
S&P espera que la facturación de Ericsson tenga un crecimiento de un solo dígito y bajo en 2013 y en 2014, y que su margen de EBITDA (resultado bruto de explotación) permanezca estable en torno al 10 por ciento en los dos próximos años.
«Podríamos revisar nuestra previsión a estable si el margen del grupo mejora gradualmente y si cualquier gasto neto en ST-Ericsson fuera conforme a la liquidez de Ericsson», señaló en un comunicado la agencia de calificación.
S&P reiteró no obstante su calificación crediticia «BBB+/A-2» a corto y largo plazo para el fabricante sueco, cuyo riesgo financiero es «modesto».
EFE
