Pavel Dúrov, fundador de Telegram, decidió revisar la política de moderación de chats privados en la aplicación tras su reciente detención e imputación en Francia.
Según una notificación de la compañía enviada a sus usuarios, ahora es posible denunciar contenidos ilegales en los chats privados, una función que no estaba disponible anteriormente.
En el mensaje, Dúrov admitió que Telegram no es perfecta, pero rechazó las acusaciones de que la plataforma sea un refugio anárquico.
Anunció además cambios destinados a mejorar la seguridad de la red social, subrayando que diariamente eliminan millones de publicaciones y canales dañinos, además de publicar informes de transparencia y mantener líneas directas con ONG para procesar solicitudes urgentes de moderación.
Dúrov calificó de sorprendente su detención en Francia, donde enfrenta cargos relacionados con blanqueo de delitos y complicidad en la difusión de imágenes pedófilas.
El empresario ruso, que también posee la ciudadanía francesa y emiratí, reconoció que el crecimiento de Telegram a 950 millones de usuarios ha presentado desafíos que han facilitado el abuso de la plataforma por parte de delincuentes. Sin embargo, aseguró que ha tomado como objetivo personal mejorar significativamente la situación.
Tras su detención en agosto, Dúrov fue puesto en libertad vigilada. También expresó su descontento con las autoridades francesas, señalando que había colaborado previamente con ellos para establecer una línea directa con Telegram en la lucha contra el terrorismo en Francia.