Zoom anunció este miércoles una actualización de su software que mejora el sistema de encripción, en respuesta a las críticas recibidas por falta de seguridad.
La plataforma de videoconferencias ha experimentado en las últimas semanas una explosión en la descarga y uso de sus servicios ante la pandemia de COVID-19 que ha obligado a millones de personas a mantener el contacto a través de medios electrónicos.
La firma californiana explicó en un comunicado que la versión 5.0 de Zoom añade soporte para el cifrado con encripción AES de 256 bits GCM, lo que proporciona una mayor protección para los datos de reuniones y resistencia contra la manipulación.
La actualización, que estará disponible esta misma semana, también permitirá que el administrador de la cuenta pueda elegir qué regiones del centro de datos usan sus reuniones y webinars para el tráfico en tiempo real a nivel de cuenta, grupo o usuario.
Por otro lado, la empresa ha agrupado todas las opciones relativas a la seguridad en un mismo icono, al que se accede a través de la barra de menú de la reunión digital, se ha activado la opción ‘sala de espera’ por defecto y permite a los anfitriones de las videoconferencias denunciar a un usuario cuya participación no ha sido permitida.
‘Estoy orgulloso de alcanzar este paso en nuestro plan de 90 días, pero esto es solo el comienzo. Nos ganaremos la confianza de nuestros clientes y les proporcionaremos felicidad con nuestro firme objetivo de proporcionar la plataforma más segura’, apuntó el CEO de Zoom, Eric S. Yuan.
Uno de los problemas más habituales que están encontrando sus usuarios es que internautas que no han sido invitados aparecen por sorpresa en las teleconferencias, un fenómeno bautizado como ‘zoombombing’ y que ha hecho que instituciones educativas, Gobiernos y empresas hayan dejado de usar la plataforma y, en el caso de Google, hasta la hayan prohibido a sus empleados.