Jaguar Land Rover Automotive se unió a la creciente lista de fabricantes de automóviles que están inactivos debido a la escasez mundial de semiconductores, una señal de que el desafío de la cadena de suministro se está intensificando.
JLR planea detener la producción en sus fábricas de Castle Bromwich y Hallewood en el Reino Unido por un periodo indeterminado a partir del 26 de abril, anunció el fabricante este jueves en un comunicado.
El primer movimiento de este tipo de la compañía, se suma a la evidencia de que la escasez que ha golpeado a la industria automotriz desde fines del año pasado, puede empeorar aún más.
El fabricante Renault dijo el jueves que los efectos de cuello de botella podrían durar más allá de este trimestre y se abstuvo de ofrecer una perspectiva financiera para el año.
Por su parte, el fabricante de repuestos Bosch advirtió que la industria automotriz probablemente tendrá que lidiar con una situación insatisfactoria durante muchos meses.
Los fabricantes de automóviles, como Volkswagen y Ford, se han visto obligados a dejar inactivas las fábricas a medida que la creciente demanda de equipos electrónicos durante la pandemia abrumaba a los proveedores. Las tormentas invernales en Texas y un incendio en la planta de chips automotrices de Renesas Electronics en Japón, exacerbaron la situación este año.
‘La visibilidad se está deteriorando’, dijo la directora ejecutiva adjunta de Renault, Clotilde Delbos, al presentar los ingresos del primer trimestre de la compañía. ‘Hace dos meses dijimos que pensábamos que el pico estaría en el segundo trimestre, pero creemos que habrá un efecto persistente al menos hasta el tercer trimestre, si no es que más’.