El SIM Swapping, también conocido como cambio de tarjeta SIM, es una técnica utilizada por los ciberdelincuentes para tomar el control de la línea telefónica de una persona.
Consiste en engañar a la compañía de telefonía móvil para que transfiera el número de teléfono del dispositivo de la víctima a otro, generalmente con el fin de acceder a cuentas bancarias, redes sociales y otros servicios que requieren autenticación de dos factores mediante SMS.
En México, el SIM Swapping ha ido en aumento en los últimos años, convirtiéndose en una preocupación creciente tanto para los usuarios como para las empresas de telecomunicaciones.
Según cifras oficiales, durante el año pasado se reportaron más de 5,000 casos de SIM Swapping en el país, lo que representa un incremento en comparación con años anteriores.
Ante esta creciente amenaza, las empresas de seguridad y tecnología están trabajando para desarrollar soluciones eficaces que puedan utilizar los usuarios y las empresas.
Según explica Eduardo Azanza, CEO y fundador de Veridas, la biometría es una herramienta clave en la lucha contra el SIM Swapping. Al utilizar rasgos únicos como huellas dactilares, reconocimiento facial o de voz, se pueden establecer sistemas de autenticación más seguros y difíciles de manipular por los ciberdelincuentes.
Al implementar soluciones biométricas en los procesos de autenticación, las compañías de telefonía móvil pueden prevenir de manera efectiva el SIM Swapping y proteger a los clientes de posibles fraudes.
¿Por qué un SMS no es un método seguro para verificar la identidad del usuario?
Al conseguir un duplicado de nuestra SIM, los estafadores automáticamente tienen acceso, además de contactos e información almacenada en la SIM, a todas las aplicaciones y servicios que tengan el envío de un SMS como procedimiento de recuperación de clave o de confirmación de una transacción o un envío.
¿Cómo evitar el fraude del SIM Swapping?
Para evitar el fraude del SIM Swapping, los factores biométricos, como la voz o la cara, son una solución efectiva. Estos factores son inherentes a cada individuo y resultan imposibles de ser suplantados, lo que los convierte en medidas de seguridad altamente seguras y confiables.
La biometría ofrece varias características importantes:
Privacidad: Los datos biométricos pertenecen exclusivamente a cada individuo y no pueden ser suplantados, clonados o interceptados por terceros. Son únicos y no se pueden replicar.
Seguridad: La utilización de factores biométricos permite pasar de la presunción a la certeza en cuanto a la identidad del usuario. Al verificar la biometría, se obtiene la seguridad de que la persona es quien dice ser, proporcionando un nivel adicional de protección en transacciones y autenticación de identidad.
Voluntariedad: Es el propio usuario quien tiene la decisión de utilizar los factores biométricos. Puede optar por utilizar la biometría como una capa adicional de seguridad, brindándole mayor control sobre su propia protección.
Además, es importante destacar que los algoritmos de biometría facial actuales se basan en técnicas de Inteligencia Artificial. Cuando se envía una imagen facial a un motor biométrico, este calcula un vector biométrico que representa la cara de la persona. Este vector no contiene información de medidas geométricas de la cara, es una representación matemática abstracta y privada de la cara, que solo es válida para el motor biométrico que lo generó.
Estos factores biométricos garantizan privacidad, seguridad y son de carácter voluntario para el usuario. Además, es crucial seguir buenas prácticas de seguridad, como no responder a números desconocidos, evitar compartir información personal por SMS, apagar el móvil regularmente y abstenerse de acceder a enlaces de fuentes no confiables.
En conjunto, la combinación de tecnologías biométricas y medidas de seguridad sólidas puede ayudar a prevenir el fraude del SIM Swapping y proteger la identidad digital de los usuarios.
