Gran parte del debate acerca de la conducción autónoma se ha centrado en el automóvil como medio de transporte, pero a medida que los coches autónomos se vayan convirtiendo en una realidad, debemos comenzar a pensar en los coches como un nuevo tipo de espacio de consumo.
De hecho, apenas empezamos a visualizar la forma en que se diseñarán estos vehículos, la interacción que habrá entre los pasajeros y cómo es que usarán el tiempo cuando ya no tengan que preocuparse por conducir.
En este sentido, la conducción autónoma es la mayor revolución hoy en día, ofreciendo una nueva plataforma para la innovación; desde el diseño dentro de la cabina y el entretenimiento a bordo, hasta los sistemas de seguridad para salvar vidas.
Intel anunció recientemente una colaboración con la compañía de entretenimiento, Warner Bros., para desarrollar experiencias inmersivas dentro de los vehículos autónomos (VA).
Con el nombre de AV Entertainment Experience (experiencia de entretenimiento en VA) ambas compañías trabajan en el primer coche de su clase, como prueba de concepto para demostrar las posibilidades que ofrecerá el entretenimiento en los vehículos del futuro.
Como miembro de la flota de 100 vehículos de prueba de Intel, este vehículo mostrará el potencial de entretenimiento en un mundo de conducción autónoma.
Un centro de entretenimiento móvil
El auge de la industria de la conducción autónoma generará uno de los mayores aumentos del tiempo disponible para el entretenimiento de los consumidores que se haya visto en mucho tiempo.
A medida que los ocupantes de los vehículos cambien de conductores a pasajeros, aumentará el tiempo que pasan conectados a sus dispositivos, incluyendo el tiempo que se utiliza para la reproducción de videos.
De hecho, encuestas recientes sobre transporte indican que los estadounidenses promedio, pasan más de 300 horas al año detrás del volante.
Con el aumento en la disponibilidad de tiempo, Warner Bros. e Intel han concebido varias posibilidades dentro del VA. Visualizamos a los pasajeros no sólo consumiendo contenido como películas y programas de televisión; imaginamos que disfrutarán de experiencias inmersivas nunca antes vistas, gracias a las innovaciones en realidad virtual (RV) y realidad aumentada (RA) a bordo.
Por ejemplo, los fanáticos de Batman podrían experimentar la sensación de viajar en el Batimóvil en las calles de Ciudad Gótica; mientras que los avances en RA transformarán los coches en lentes a través de los cuales se observe el mundo exterior, permitiendo a los pasajeros ver publicidad y vivir nuevas experiencias.
Si bien las posibilidades de entretenimiento a bordo son increíbles de imaginar, la prueba definitiva para el futuro de los vehículos autónomos será la de conquistar a los pasajeros. La tecnología no tendrá ninguna importancia si no hay conductores que confíen en ella y que se sientan cómodos usándola.
Seguridad inteligente
La tecnología no se trata solamente de disfrutar el viaje, sino también de salvar vidas. De hecho, los sistemas autónomos representan la extensión lógica de los cinturones de seguridad, las bolsas de aire y los sistemas de frenado antibloqueo.
Actualmente, la tecnología ADAS (por sus siglas en inglés) o sistema avanzado de apoyo a la conducción) de Mobileye está siendo utilizada y salvando vidas en las carreteras.
Los productos actuales de ADAS de Mobileye han demostrado una disminución de accidentes en un 30%, salvando 1,400 vidas, evitando 450,000 choques y ahorrando 10 mil millones de dólares en pérdidas económicas. Sin embargo, no podemos detenernos ahí. Nuestro objetivo a largo plazo debe ser: cero fatalidades relacionadas a la conducción.
Para alcanzar este objetivo, necesitamos estándares y soluciones que permitan la producción y adopción de vehículos autónomos a gran escala. En el largo periodo durante el cual los vehículos autónomos compartirán la carretera con conductores humanos, el sector necesitará estándares para asignar la responsabilidad en caso de colisión de manera definitiva.
Con este objetivo en mente Intel está colaborando con la industria y los legisladores para establecer sistemas de medición e interpretación del rendimiento de los coches autónomos en materia de seguridad.
Al establecer de antemano normas claras de responsabilidad se reforzará la confianza del público y aclarará los riesgos de responsabilidad para los consumidores, para la industria automotriz y la industria de seguros.
Intel y Mobileye ya han propuesto un modelo formal matemático llamado Seguridad Sensible a la Responsabilidad (RSS por sus siglas en inglés), para garantizar, desde la planeación hasta la toma de decisiones, que el sistema del vehículo autónomo no genere ningún comando que conduzca a un accidente.
Finalmente, los sistemas de seguridad del futuro se basarán en las tecnologías más eficientes para manejar la enorme cantidad de procesamiento de datos requerido para la inteligencia artificial.
Mobileye es líder mundial en tecnología ADAS y creador de algoritmos que pueden alcanzar niveles de percepción visual superior a los humanos mediante cámaras.
Ahora, con la combinación de los «ojos» de Mobileye y el «cerebro» del microprocesador de Intel, podemos ofrecer más del doble de eficiencia en cuanto al aprendizaje profundo que la competencia.
Se trata de una diferencia considerable y muy significativa. Un aprendizaje profundo con más del doble de eficiencia permite mejorar el consumo de combustible y emplear soluciones de refrigeración menos costosas.
Desde el entretenimiento hasta los sistemas de seguridad, consideramos que el vehículo autónomo es una de las plataformas más interesantes en la actualidad; este es sólo el comienzo del renacimiento de la industria automotriz.
Por Brian Krzanich, CEO de Intel Corporation