Sony reportó ganancias netas de 809,000 millones de yenes (5,700 millones de euros) entre abril y diciembre, lo que supone un aumento del 4.9% interanual, según su informe financiero publicado hoy.
La multinacional japonesa consiguió en el período una ganancia operativa de 1.08 billones de yenes (7,614 millones de euros), un 1.5% más que en el año anterior, gracias al cierre de varios litigios y a la recuperación de las pérdidas asociadas a la sustracción ilegal de fondos de su rama aseguradora.
La facturación por ventas de Sony se incrementó un 10.7% en dichos meses, hasta 8.48 billones de yenes (59,780 millones de euros), que la empresa atribuyó a un incremento significativo de las ventas en sus ramas de videojuegos, música e imagen.
Sony logró mantener el crecimiento en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal (que concluirá el próximo 31 de marzo) gracias a la resolución de varios litios en su segmento de música y también del robo en su rama de seguros, lo que le generó un impacto positivo de 787,100 millones de yenes (5,550 millones de euros), explicó.
A ello se sumó la mejora del rendimiento especialmente de su rama de videojuegos, la de mayor peso en sus cuentas, así como en la de música e imagen, que lograron compensar un desempeño más deficiente de la rama cinematográfica del conglomerado, especialmente en su tercer trimestre fiscal, de octubre a diciembre.
Sony logró mantener el crecimiento acumulado gracias a un incremento significativo en sus negocios de videojuegos y música que consiguieron mitigar la caída trimestral.
Después de cierto frenazo en el desarrollo de la rama de juegos por la ausencia del boom que la pandemia de covid-19 causó y por el aumento de costos de producción, este segmento subió su beneficio operativo un 25% debido al incremento del 53% de las ventas en los tres meses hasta diciembre.
Sony atribuyó este incremento a una mayor comercialización de consolas, que se vieron afectadas en meses anteriores por la falta de existencias que ha venido corrigiendo, así como de juegos de sus estudios internos y también de desarrolladoras externas.
En lo que respecta a Sony Music, su operativo aumentó un 14% en esos meses y sus ventas un 23%, gracias a un mayor volumen de ventas vinculadas a servicios de suscripción de streaming.
En lo que respecta a sus previsiones para la totalidad del ejercicio de 2022, que cerrará a finales del próximo marzo, Sony mejoró su estimación de beneficios netos, hasta 870,000 millones de yenes (6,140 millones de euros).
La cifra es un 3.6% mejor a la calculada el pasado noviembre, pero se mantiene un 1.4% por debajo de lo que el grupo se embolsó en el ejercicio precedente de 2021.
Sony también mejoró su previsión de ganancia operativa, hasta 1.18 billones de yenes (8,330 millones de euros), que supondría un 1.85% interanual menos, pero redujo su estimación de ventas, hasta 11.5 billones de yenes (81,160 millones de euros), que seguiría suponiendo un 15.9% interanual más que en 2021.
