Internet ya es visto por las empresas y comercios como un medio para dar a conocer el negocio, así como explorar nuevos canales de venta y de contacto con clientes, al tiempo que para el usuario representa la forma más cómoda de encontrar información de manera rápida.
El potencial y los beneficios de estar en la web son inmensos, pero para poder tener un sitio útil y alcanzar los objetivos de negocio, se deben tener en cuenta diversas variables, entre las que destacan:
- Un diseño atractivo.
- Contenidos actualizados, adecuados y de interés para el usuario.
- Organizar el sitio de forma que se pueda encontrar la información de manera rápida.
- Garantizar la seguridad y la protección de datos personales de los usuarios que visitan el sitio, sobre todo en el caso del e-commerce.
Por ello, las empresas deben contar con la tecnología que les permita funcionar de manera correcta y cumplir con las expectativas de los usuarios que ingresan a su sitio web y quienes se convertirán en sus clientes potenciales.
Según un sondeo entre desarrolladores y programadores de sitios web, el aspecto tecnológico es el que menos toman en cuenta los negocios cuando buscan tener presencia en la red, lo cual puede ser perjudicial en momentos en que se lanzan promociones o descuentos, que incrementan el tráfico en el sitio.
En ese momento es cuando contar con tecnología que logre un correcto balance de carga es fundamental para que el sitio funcione y no “se caiga” ante la gran demanda de los consumidores. Actualmente, existe tecnología que facilita este proceso, como son los controladores de entrega de aplicaciones o ADC (Application Delivery Controllers).
Un ADC es un dispositivo de red ubicado en el centro de datos que ayuda a realizar tareas que comúnmente llevan a cabo los sitios web, con el objetivo de eliminar la carga de los servidores web propios.
El ADC idóneo debe tener las siguientes características:
- Poder optimizar y distribuir adecuadamente el tráfico a los servidores web.
- Contar con seguridad avanzadas que puedan detectar tráfico malicioso de hackers.
- Capacidad de proteger los servidores y aplicaciones que alojan los datos críticos.
- Soportar grandes olas de tráfico y un tanto más de tráfico entrante.
- Brindar soporte a las últimas tecnologías móviles, ya que cada vez más personas compran desde smartphones o tablets.
- Soportar dos factores de autenticación del cliente, lo cual brindará mayor protección al negocio.
El tener un sitio web para la empresa debe ser visto como parte de la estrategia de difusión y posicionamiento de la imagen corporativa de una organización, y se debe poner especial atención en él, así como en la información que se brinde al usuario.
La empresa o negocio tendrá en su sitio web una fuente inagotable de información y de contacto con sus clientes. Para éstos, ese primer acercamiento en línea y la experiencia que tengan será un factor determinante para que decidan o no entablar una relación comercial.