El grupo franco-estadounidense Alcatel-Lucent indicó hoy que va a suprimir 10,000 empleos netos en todo el mundo, un 15% de su plantilla, para tratar de salir de los números rojos y salvarse en un mercado tan competitivo como es el de los equipos de telecomunicaciones.
Alcatel-Lucent explicó en un comunicado que todas las regiones del mundo en que está presente se verán afectadas por este ajuste que se llevará a cabo de aquí a finales de 2015, y que estaba siendo comunicado esta mañana a los representantes del comité de empresa europeo.
En concreto, serán 4,100 empleos menos en Europa, Oriente Medio y África, 3,800 en Asia Pacífico y 2,100 en América.
El llamado plan ‘Shift’ se marca como objetivo reducir los costos fijos en 1,000 millones de euros en 2015, lo que significaría un 15%, y para conseguirlo establece tres ejes, incluida «la reducción de las funciones de soporte, administrativas y comerciales, en línea con los estándares de la industria».
Las otras dos son un recorte del 60% en el dinero dedicado a las tecnologías consideradas «en fin de vida» para consagrar de forma prioritaria los esfuerzos de investigación y desarrollo (I+D) a las «tecnologías de futuro» -las redes internet (IP), la nube y el acceso de banda ancha-, cuyo peso aumentará del 65% actual al 85%.
Les Echos y Le Figaro precisaron que esta nueva reestructuración que el responsable ejecutivo de Alcatel-Lucent desde abril, Michel Combes, presentó ayer a la ministra francesa de Economía Digital, Fleur Pélerin, contempla en la práctica la eliminación de 15,000 puestos de trabajo, compensados con la creación de otros 5,000 en oficios y ubicaciones diferentes.
En Francia, la disminución será de 900 personas (un 10% de la plantilla en el país) a las que habrá que añadir otras 900 afectadas por mutaciones debido al cierre de algunas instalaciones (en particular las de Toulouse y Rennes) o a su paso a otras empresas a las que Alcatel-Lucent tiene intención de subcontratar una parte de su actividad.
Alcatel-Lucent subrayó que con este ajuste pretende garantizar su continuidad mediante la transformación de la compañía en dirección de las que define como las «tecnologías de futuro» y poner la empresa «en el camino de la rentabilidad».
Según Le Figaro, el objetivo es volver a tener utilidades en 2015. El pasado ejercicio, la empresa -que no ha salido de los números rojos desde 2007- encajó 1,300 millones de euros de pérdidas a causa en gran medida de la depreciación de sus activos.
EFE
