Los códigos QR están en todas partes, facilitando el acceso instantáneo a servicios e información. 7 de cada 10 mexicanos confían en ellos a la hora de utilizarlos en restaurantes, mientras que casi la mitad confía en los códigos QR en estacionamientos.
¿Qué son los códigos QR?
Un código QR es una matriz de cuadrados o píxeles en blanco y negro organizados en una cuadrícula, que almacena datos para que un dispositivo, como un smartphone o una cámara, pueda leer y procesar rápidamente la información contenida. Esto los convierte en una forma conveniente de almacenar y acceder a datos.
¿Son seguros?
En general, los códigos QR son seguros, ya que solo transmiten información a un dispositivo, normalmente un teléfono móvil. No pueden iniciar acciones por sí mismos ni ser hackeados en sí mismos. Sin embargo, los estafadores pueden reemplazar códigos QR legítimos con códigos QR maliciosos, llevando a sitios de phishing, induciendo a descargar malware o engañando de otras maneras.
Los ciberdelincuentes pueden usar códigos QR falsos para dirigir a las personas a sitios web peligrosos que contienen estafas de phishing o malware, que pueden infectar el dispositivo sin interacción del usuario.
Según una investigación reciente de Norton, los mexicanos son conscientes de este riesgo. La confianza en los códigos QR no es alta en la mayoría de los lugares: el porcentaje más alto de confianza es del 72% en restaurantes, disminuyendo a 53% en conciertos, 50% en bares, 48% en festivales y 49% en estacionamientos.
En 2020, por ejemplo, los parquímetros de Austin (Texas) llevaban calcomanías con códigos QR para pagar el estacionamiento en línea, pero estos códigos dirigían a un sitio web falso que robaba información de tarjetas de crédito. Las víctimas no solo perdían dinero e información financiera, sino que también recibían multas por estacionarse ilegalmente.
Por ello es crucial estar informado y escanear con precaución. Aunque la mayoría de los códigos QR son seguros, no se debe confiar ciegamente en todos. Hay que desconfiar de los códigos publicados o enviados por correo electrónico y siempre verificar la URL antes de hacer clic, aconseja Iskander Sánchez-Rola, Director de Innovación en Privacidad de Norton.
Iskander también explica que a medida que los códigos QR se vuelven más comunes, aumenta el riesgo de encontrarse con códigos maliciosos o enlaces dudosos, y los dispositivos móviles son especialmente vulnerables.
Los dispositivos móviles necesitan un software de ciberseguridad completo, que ofrezca múltiples capas de protección en tiempo real contra malware, phishing y sitios web falsos. Conocer estos riesgos y cómo protegerse puede ayudar a evitar que una amenaza potencial se convierta en un problema mayor, concluye Iskander.
