Meta, propietaria de las redes sociales Instagram y Facebook, dijo que prohibirá a sus anunciantes dirigir publicidad basada en el género a los adolescentes, sumando una nueva restricción a los datos que estas empresas pueden utilizar.
La empresa destacó que sigue haciendo cambios a la experiencia publicitaria de los adolescentes que usan las aplicaciones para que los anuncios que ve el público más joven sean apropiados para su edad, y aseguró que está respondiendo a las investigaciones y regulaciones sobre el asunto.
A partir de febrero, los anunciantes solo podrán dirigir su publicidad a los usuarios adolescentes basándose en su edad y ubicación, pero no en el género ni en la información ligada a los contenidos que les hayan gustado previamente en las aplicaciones de la tecnológica, indica la nota.
Meta además incluirá a partir de marzo nuevos controles de publicidad específicos para los adolescentes, que podrán indicar sus preferencias y elegir ver menos anuncios de algún tema en concreto.
‘Reconocemos que los adolescentes no están necesariamente tan equipados como los adultos para tomar decisiones sobre cómo se usan sus datos en línea para la publicidad, particularmente en cuanto a los productos a la venta que se les muestran’, detalló Meta.
Ante las quejas de padres e instituciones por el impacto de su política de publicidad dirigida a menores, Meta ya ha aplicado un número de restricciones a los anunciantes, como prohibir que dirijan contenidos de alcohol o productos financieros y de pérdida de peso a los adolescentes.
La empresa ya prohibió en 2021 a esas empresas basar sus anuncios en los intereses y actividad de los adolescentes en internet.
Por otra parte, los jóvenes usuarios tienen la opción de bloquear la publicidad de anunciantes concretos.
Las prácticas publicitarias de Meta están sometidas a gran escrutinio y en Europa ha sido multada ya varias veces por la Comisión de Protección de Datos de Irlanda (DPC), principal regulador en el ámbito de la protección de datos en la Unión Europea (UE).
En septiembre, el DPC impuso una multa de 405 millones de euros a Instagram por su gestión de datos de menores.