Los gerentes de Panasonic necesitan experimentar una mayor sensación de crisis dada la baja rentabilidad de la compañía y serán juzgados en consecuencia, dijo el director ejecutivo, Yuki Kusumi.
‘Si no producen resultados, habrá que reemplazarlos’, dijo Kusumi. ‘La razón por la que no se obtienen resultados es la falta de sensación de crisis’.
Esas son palabras inusualmente duras en Japón y especialmente en Panasonic, donde la noción del empleo vitalicio fue adoptada durante años.
Hace dos meses, Kusumi advirtió en una sesión informativa estratégica que el fabricante japonés de productos electrónicos, con sede en Osaka, se estaba quedando atrás en sus objetivos de rentabilidad y que reduciría el número de negocios con problemas a cero para marzo de 2027.
Panasonic, que alguna vez fue el líder mundial en electrónica de consumo, es ahora un proveedor clave de baterías para Tesla e invierte en software, mientras busca mantener su relevancia en electrodomésticos y dispositivos industriales.
La desaceleración de la demanda de coches eléctricos ha afectado a algunas de sus fábricas de baterías, lo que ha provocado la parada de algunas líneas de producción en su fábrica de Suminoe en Osaka, dijo el director general.
‘Lo que más me preocupa es que no hemos logrado la rentabilidad necesaria para obtener el apoyo de los inversionistas. Aunque los precios de las acciones en Japón están subiendo, nuestras acciones están estancadas en alrededor de 1,300 yenes’, agregó el directivo.
‘La gerencia, especialmente la alta dirección, como los gerentes de división y los presidentes de las unidades de negocio, necesita sentir una fuerte sensación de crisis por la falta de resultados’, dijo Kusumi.