La tendencia de los inversionistas generalistas hacia la inteligencia artificial ha dificultado el financiamiento de startups de tecnología climática, impactando a una industria que se encuentra en un punto crucial en su lucha contra los efectos del cambio climático.
En el tercer trimestre, las empresas de tecnología climática lograron recaudar aproximadamente 10,300 millones de dólares en mercados públicos y privados a nivel mundial, sugiriendo que el financiamiento anual podría caer hasta un 50% este año, de acuerdo con datos de BloombergNEF.
En comparación, los recursos destinados a la IA han seguido en ascenso, superando los 21,000 millones de dólares en el mismo periodo, según estimaciones de Pitchbook.
Este aumento de capital hacia la IA, en lugar de la tecnología climática, recuerda el auge de los dispositivos móviles en 2010, un fenómeno que desvió considerable inversión de otras áreas tecnológicas.
Además de la competencia de la IA, el financiamiento para tecnología climática ya mostraba una tendencia a la baja antes del rápido avance de la IA generativa en 2023, debido a factores como las altas tasas de interés, la inflación y la inestabilidad geopolítica.
Sin embargo, la aceleración de inversión en IA en detrimento de la tecnología climática podría tener efectos irreversibles en este sector emergente. La oportunidad para reducir los impactos críticos del cambio climático se ha ido estrechando, lo que subraya la urgencia de impulsar el apoyo financiero en tecnología climática innovadora.
Las proyecciones a corto plazo, incluidas las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos, podrían representar una de las últimas oportunidades significativas para tomar decisiones que fortalezcan la acción climática.