Samsung Electronics reportó una caída del 48% interanual en su ganancia neta entre abril y junio, al cerrar el trimestre con 5.11 billones de wones, equivalentes a unos 3,680 millones de dólares.
El retroceso se debe principalmente al bajo rendimiento de su división de semiconductores, afectada por la débil demanda de memorias de alto ancho de banda (HBM).
La ganancia operativa del grupo fue de 4.67 billones de wones, unos 3,240 millones de dólares, lo que representa una disminución del 55.2% frente al mismo periodo del año anterior, según un informe entregado a las autoridades regulatorias.
En cuanto a los ingresos por ventas, la empresa alcanzó los 74.56 billones de wones, equivalentes a 51,780 millones de dólares, con un crecimiento interanual del 0.7%, aunque esa cifra representa una caída del 5.8% en comparación con el primer trimestre.
La división de chips registró una ganancia operativa de 400 mil millones de wones, unos 278 millones de dólares, su nivel más bajo desde el cuarto trimestre de 2023, cuando tuvo pérdidas operativas por 2 billones de wones, equivalentes a 1,390 millones de dólares. Aunque las ventas de semiconductores crecieron 11% frente al año pasado, la demanda por memorias HBM se mantuvo débil.
Para la segunda mitad del año, la compañía planea responder a la creciente demanda de productos de alto valor ligados a inteligencia artificial y fortalecer su posición en el mercado de semiconductores avanzados.
En cuanto a su división DX, que incluye teléfonos, televisores y electrodomésticos, las ventas cayeron 16% interanual hasta los 43.6 billones de wones, unos 30,280 millones de dólares. Este descenso se relaciona con una baja en el volumen de ventas tras el lanzamiento de nuevos modelos de teléfonos en el primer trimestre, además de un entorno competitivo más fuerte.
Samsung ya había adelantado a inicios de mes que esperaba una fuerte caída en su ganancia operativa para este trimestre, debido a la debilidad de su negocio de chips y al impacto de las políticas arancelarias de Estados Unidos.
