La empresa nacional de ferrocarriles de Suiza, CFF, comenzó a utilizar drones para combatir el creciente problema del grafiti en su vasta red de trenes, según informó la agencia de noticias helvética ATS.
Esta medida, que busca reforzar la seguridad y proteger las instalaciones, marca un nuevo enfoque tecnológico en la lucha contra el vandalismo.
Los drones, que vuelan a una altura de hasta 30 metros, están diseñados para detectar a sospechosos que merodean cerca de las vías, especialmente durante las horas nocturnas, cuando suelen ocurrir estos actos de grafiti.
Según CFF, los dispositivos permiten una vigilancia eficaz y constante, disuadiendo a los potenciales autores de actos vandálicos.
Estos vuelos no tripulados son operados desde tierra por personal especializado y se realizan con drones modelo Beehive 1, fabricados por la empresa suiza Sunflower Labs. La operación comenzó a principios de julio, tras obtener el permiso correspondiente de la Oficina Federal de Aviación Civil, según detalló ATS.
CFF optó por no divulgar el número exacto de drones en uso ni los lugares específicos donde se han desplegado, citando razones de seguridad.
La empresa, que gestiona una de las redes ferroviarias más densas de Europa, señaló que cada año invierte millones de francos en la limpieza de grafitis y la reparación de los daños ocasionados por estos y otros actos de vandalismo.
La introducción de drones es parte de una estrategia más amplia de CFF para proteger su infraestructura y reducir los costos asociados con el vandalismo, un problema que ha ido en aumento en los últimos años.
Con esta medida, la empresa espera no solo minimizar los daños, sino también enviar un mensaje claro de que se toman en serio la protección de su red de transporte.