El impulso global para utilizar la inteligencia artificial en la búsqueda de nuevos medicamentos enfrenta una prueba crucial a medida que uno de los favoritos se acerca a las últimas etapas de los ensayos de un fármaco descubierto mediante algoritmos.
Insilico Medicine, con sede en Nueva York y Hong Kong, empleó la inteligencia artificial para desarrollar un fármaco experimental destinado a tratar la fibrosis pulmonar idiopática, una enfermedad pulmonar incurable.
El tratamiento actualmente se encuentra en las etapas iniciales de ensayos en Estados Unidos y China, con resultados esperados a principios de 2025.
La industria farmacéutica sigue de cerca los resultados de los ensayos de Insilico, ya que la compañía utilizó la inteligencia artificial para identificar un nuevo enfoque en la lucha contra esta enfermedad mortal y para desarrollar una molécula innovadora para tratarla.
El investigador británico Deep Pharma Intelligence afirma que la terapia de Insilico es el primer candidato preclínico de la industria mundial totalmente basado en inteligencia artificial.
Aunque las empresas farmacéuticas en todo el mundo están invirtiendo fuertemente en inteligencia artificial, aún no hay pruebas claras de que esta tecnología pueda generar terapias que salven vidas.
Agunos otros compuestos líderes basados en inteligencia artificial han enfrentado contratiempos, y el éxito de Insilico podría demorar años en llegar al mercado.
Al mismo tiempo, las implicaciones de cualquier éxito serían enormes y abrirían la puerta a terapias basadas en inteligencia artificial más nuevas y asequibles, capaces de salvar vidas y reducir costos para los sistemas de salud.
Los científicos involucrados provienen principalmente de Canadá y los Emiratos Árabes Unidos, donde colaboran ucranianos y rusos. Gran parte de las pruebas de laboratorio se subcontratan en China continental, mientras que el personal en Taiwán se asocia con otras compañías farmacéuticas.
Insilico se destaca por haber identificado un nuevo objetivo mediante inteligencia artificial, haber descubierto una molécula con esta tecnología, y haber llegado a la mitad de los ensayos clínicos, según afirmó el fundador y director ejecutivo, Alex Zhavoronk. Si el fármaco de la empresa para las enfermedades pulmonares se desarrolla con éxito, ‘eso cambiaría todo’.
La compañía está convirtiéndose en un actor global de primer nivel en el espacio del descubrimiento de fármacos mediante inteligencia artificial, según Ming Fang, encargado de la franquicia de atención médica, consumo e Internet en China para Warburg Pincus.
Su modelo de negocio, que aprovecha la inteligencia artificial para identificar nuevos objetivos, diseñar compuestos novedosos y asociarse con otras farmacéuticas para su desarrollo, resulta muy atractivo, afirmó.
