China comenzó a utilizar uniformes inteligentes para controlar la asistencia y la ubicación de sus estudiantes, según el diario oficial Global Times.
De esta forma, al menos diez centros educativos que han comenzado a utilizar dichos uniformes, reciben información precisa sobre la hora de entrada y de salida de los alumnos.
Posteriormente, esta información es compartida de forma automática con los padres de familia y profesores, señaló el periódico.
Los creadores de los uniformes explican que las prendas están equipadas con una voz de alarma que se activa automáticamente si un alumno está fuera del colegio sin permiso o si tratan de desprenderse de los uniformes, gracias a la tecnología de reconocimiento facial instalada en los centros.
Asimismo, las prendas están equipadas con dos chips en los hombros capaces de resistir 500 lavadas a 150 grados de temperatura.
La iniciativa ha afrontado diversas críticas debido a la posibilidad de que los estudiantes puedan ser localizados incluso en horario extraescolar, sin embargo, estos temores han sido desmentidos por el director de uno de los centros promotores de esta tecnología en la provincia de Ghizhou, Lin Zongwu.
‘No queremos verificar la ubicación precisa de los estudiantes después de la escuela, pero cuando un alumno falta o se salta una clase, los uniformes nos ayudan a localizarlos’, afirmó Lin, quien añadió que desde que se comenzaron a usar los uniformes inteligentes la asistencia a clase ha aumentado considerablemente.