Sony invertirá en la startup Cogitai para desarrollar una tecnología de inteligencia artificial (IA) que muestre necesidad continua de aprender para aplicarla después a electrónica de consumo.
La firma nipona apuesta a comercializar estos nuevos productos capaces de aprender de manera constante y autónoma dentro de unos tres años.
El objetivo es que ‘mediante la interacción con el mundo real los objetos del día a día estén más capacitados y sean más prácticos e inteligentes’, y de esa forma superar las limitaciones actuales de la IA mediante la combinación del ‘aprendizaje por refuerzo’ y el ‘aprendizaje profundo’, según Sony.
Un ejemplo de producto con capacidad autónoma para aprender a partir de su interacción con usuarios y otros elementos del entorno sería el de una cámara fotográfica que con el tiempo sea capaz de sugerir soluciones prácticas y a la vez sorprendentes al fotógrafo que la utiliza para intentar satisfacer sus gustos estéticos.
EFE