Las peticiones en defensa de diversas causas sociales realizadas en plataformas en Internet no sólo han ganado en Brasil cada vez más adeptos dispuestos a suscribirlas sino que han conseguido que algunas autoridades y hasta la FIFA revisen decisiones polémicas.
A principios de junio Felipe Melo, profesor de biología en la Universidad Federal de Pernambuco, creó una petición en change.org para exigir al Ministerio de Medio Ambiente de Brasil la creación de una reserva para proteger al armadillo, la mascota oficial del Mundial de Fútbol Brasil 2014.
En los cuatro primeros días más de 65,000 personas firmaron la petición en defensa de esta especie en peligro de extinción.
Esta iniciativa es un ejemplo de cómo la sociedad brasileña está cada vez más interesada en las redes para dar visibilidad a sus problemas y recabar apoyos.
Una de las peticiones más ilustrativas del creciente peso de Internet como plataforma para reivindicar fue la creada por Rita Santos, presidenta de la Asociación de Baianas de Acarajé, las mujeres procedentes del estado de Bahía que, debidamente ataviadas, preparan y venden este típico plato de la comida afrobrasileña.
Al enterarse de que la FIFA había prohibido la venta del tradicional acarajé en el estadio mundialista de Fonte Nova durante los partidos de la Copa Confederaciones de 2013, algo que las «baianas» vienen haciendo desde hace más de 60 años, Rita decidió liderar la recogida de firmas en Internet.
Tras ocho meses de movilización y más de 17,000 firmas, la FIFA levantó la restricción. Los aficionados que acudan este sábado al Fonte Nova para ver el partido entre España y Holanda podrán saborear el plato más famoso de la ciudad de Salvador.
El éxito de las «baianas» en Internet inspiró a los vendedores de tapioca, plato típico del nordeste de Brasil a base de goma de mandioca, que afrontaban un problema similar en las inmediaciones del también mundialista estadio Arena de Pernambuco.
«No tengo duda de que, sin la movilización online, no habrían conseguido llamar tanto la atención», comenta la directora de campaña de change.org Brasil, Graziela Tanaka, en referencia a las 25.000 firmas recogidas por la petición de los tapioqueros de Recife.
Pedro Prata, portavoz de change.org en Brasil, explicó que la plataforma ha multiplicado por seis el número de usuarios desde su llegada en 2009.
Otras iniciativas emergentes como Mídia Ninja y Twitcasting están canalizando el descontento de parte de la sociedad brasileña en torno a la organización del Mundial de Fútbol que comenzó ayer.
Mediante el uso de cámaras y teléfonos con conexión a Internet, muchos brasileños participan ahora en la retransmisión en directo de las manifestaciones que desde el año pasado sacuden a Brasil por diferentes motivos.
Un estudio sobre tendencias en las redes sociales de Brasil publicado en mayo por la Universidad Federal de Espíritu Santo calcula que los medios alternativos brasileños en Internet ya cuentan con 15 millones de usuarios y concluye que una gran parte de los medios del país se siente humillada por los testimonios de primera mano transmitidos por los ciudadanos, en palabras del académico Fabio Malini.
El Gobierno de Brasil mostró su interés ante el creciente protagonismo social de las redes el pasado 23 de abril, cuando la presidenta Dilma Rousseff sancionó un nuevo marco de derechos civiles en Internet, equivalente a una constitución de la red.
En opinión de varios colectivos de ciberactivistas, el nuevo marco preserva el carácter democrático de Internet.
EFE
