Brasil anunció el inicio del proyecto ‘Norte Conectado’, una iniciativa para establecer un ‘anillo de internet’ que conectará a los ocho países amazónicos.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, hizo este anuncio en la ciudad de Santarém, situada en medio de la selva amazónica, a unos 700 kilómetros de Belém, donde se celebrará una cumbre de líderes amazónicos en los próximos días.
El programa ‘Norte Conectado’ comenzará con la instalación de cables de fibra óptica en los ríos amazónicos, lo que permitirá llevar conexiones de internet adecuadas a numerosos pueblos en la región que hasta ahora carecían de acceso a la red.
Aunque no se ha establecido una fecha precisa, se prevé extender esta red de cables hacia ciudades fronterizas de los otros siete países amazónicos: Bolivia, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela.
En total, se desplegarán aproximadamente 12,000 kilómetros de cables, beneficiando a unos 10 millones de personas. Se estima que la inversión para este ambicioso proyecto alcanzará los 1,300 millones de reales.
Una de las ventajas significativas de tender los cables a lo largo de los ríos es que se evitará la tala de alrededor de 58 millones de árboles, que de otra manera serían necesarios si se optara por instalar las redes en tierra firme.
El propósito del proyecto ‘Norte Conectado’ va más allá de la conectividad, ya que también busca proteger la biodiversidad y los recursos naturales de la región. Lula enfatizó que el objetivo principal es salvaguardar las selvas, el agua y la fauna amazónicas, además de mejorar la calidad de vida de las comunidades locales.
El proyecto representa un paso importante hacia el fortalecimiento de la infraestructura digital en la Amazonia y una muestra del compromiso de los países amazónicos para preservar su patrimonio natural y mejorar el bienestar de sus poblaciones.